
Contemplación lírica XIV
Cuando el viento sopla, sopla Antje van der Maas El aire estaba quieto La tierra yacía en penumbra Todos los sentidos adormecidos Los corderos dormían suavemente.
Cuando el viento sopla, sopla Antje van der Maas El aire estaba quieto La tierra yacía en penumbra Todos los sentidos adormecidos Los corderos dormían suavemente.